Se perdió el volado de la moneda pero no el partido.
El equipo de los Raiders en un emocionante juego derrotaron a los Jefes de Kansas City. Desde antes de que los equipos saltaran al terreno de juego, este partido ya era noticia.
El Coliseo de Oakland estaba repleto, por primera vez en mucho tiempo, los aficionados desde muy temprano se dieron cita en el estacionamiento del Coliseo.
El aroma de la variedad de comida se respiraba por todas partes, la Nación Raider se había convertido en una academia culinaria y a pesar del sistema lluvioso que pasaba por el norte de California, el ambiente era de fiesta en el Coliseo de Oakland. La música, comida y cervezas mas frías, solo se esperaba que el reloj diera la 1:15 de la tarde porque el nerviosismo cada vez era mas grande.
Por fin llegó la hora en ambos equipos salieron a jugar uno de los partidos mas importantes de la temporada porque la diferencia entre ganar y perder seria de dos juegos entre el primero y el segundo lugar de la División Oeste de la Conferencia Americana, los Raiders de ganar quedarían a medio juego de Kansas City de lo contrario se verían a dos juegos y medio.
Ambos equipos comenzaron muy flojos a la ofensiva, sin embargo los Jefes pegaron primero comenzando el segundo cuarto, Matt Cassel conectó un pase de 11 yardas con su receptor abierto Verran Tucker para la primera anotación, posteriormente en el mismo cuarto un gol de campo de 43 yardas conectado por Ryan Succop ponía el marcador 10 a 0 en favor de Kansas City y mientras la ofensiva de Oakland brillaba por su ausencia, los Jefes amenazaban con aumentar su ventaja en los últimos segundos de la primera mitad, pero Matt Cassel fue interceptado en la zona de anotación por el esquinero de los Raiders Jeremy Ware y esto los mandó al medio tiempo con la esperanza de que la ofensiva de los Raiders despertara en la segunda mitad.
A los Raiders les tocó recibir el balón al iniciar el tercer cuarto. Jacoby Ford se movía constantemente y no dejaba de bailar al ritmo de la música del Coliseo parecía como si estuviera tratando de calmar los nervios. Ryan Succop pateó el balón, Jacoby Ford lo recibió en la yarda 6 y de ahí arrancó con alegría y velocidad y a base de quiebres de cintura fue dejando rivales sembrados en el lodo del Coliseo poniendo de pie a los aficionados que abarrotaban las gradas mientras recorría las 94 yardas para llegar a la tierra prometida y darle los primeros puntos a los locales.
Esto solo era el comienzo de la batalla que llegó hasta el final poniendo a los aficionados al borde de sus asientos por que el equipo visitante estaba ganando 20-17 y aunque Oakland estaba a la ofensiva en el reloj solo quedaban 24 segundos. Después de un castigo que le habían marcado a Jared Veldheer, los Raiders enfrentaban primera oportunidad y 20 yardas por avanzar lo cual parecía muy difícil. Jason Cambell lanzó un pase largo y cuando de primera instancia parecía que era interceptado apareció el novato de oro, el mismo Jacoby Ford, para robar ese balón y poner a su equipo en la yarda 22 de Kansas City. Jason Cambell rápidamente azotó el balón para detener el reloj y con solo siete segundos, Sebastian Janikowski conectó un gol de campo de 41 yardas para empatar el partido para mandarlo a tiempo extra.
Kansas City ganó el volado de la moneda y obviamente eligió recibir el balón pero la defensiva de los Raiders los detuvo en las primeras tres oportunidades obligándolos a despejar.
Oakland entró a la ofensiva en su propia yarda 38 y en la primera jugada Jason Cambell lanzó un pase de 47 yardas hasta la yarda 15 de K.C donde apareció el novato de oro....sí, Jacoby Ford, para hacer una espectacular recepción dejando a su equipo nuevamente con la mesa servida. Después de una jugada por tierra sin avance, ingresó Janikowski para conectar un gol de campo de 33 yardas para convertir el nerviosismo en júbilo y mandar a todos los aficionados de los Raiders contentos a su casa.
Con esta actuación Jacoby Ford se convirtió en el segundo jugador en la historia de la NFL en lograr 140 yardas en recepciones y 150 regresando balones en patadas de inicio y como dijeran en la Plaza México, se llevó la tarde y las palmas del respetable.
Ahora el equipo de los Raiders puede disfrutar de su semana de descanso para sanar las lesiones de sus jugadores tan importantes como son Zach Miller y Nnamdi Asomugha y de perder Kansas City su próximo juego contra Denver, los Raiders estarían compartiendo el primer lugar de su división.
Su próximo partido será contra los Acereros de Pittsburg en el Estadio Heinz Field, el 21 de Noviembre y usted lo pude escuchar en español en las voces de Ambrosio Rico y Fernando Arias por la Kaliente 1370 AM o por www.1370am.com a partir de las 10:00 de la mañana hora del pacífico.