George fue un gran jugador de los Raiders y un amigo personal del dueño Al Davis.
Cuando Al Davis lo presentó en la ceremonia de inducción al Salón de la Fama en 1981, lo denominó como el mejor jugador conocido en el football profesional cuando el partido estaba en riesgo.
El Milagro de George Blanda en 1970 quedará grabado en la historia de los Raiders y del football profesional. En ese año Blanda realizó hazañas de último momento como mariscal de campo y pateador para darle la victoria a los Raiders en cuatro ocasiones y un empate.
Expresamos nuestras sinceras condolencias para su esposa Betty y el resto de su familia y los acompañamos en su dolor por nuestro gran amigo.
Se llevará a cabo un funeral privado para su familia.